La ropa interior femenina ha evolucionado

por Viviana Fernandez

Sin duda la ropa interior ha servido, sobre todo a la mujer, para conformar una estética en torno a la belleza que ha cambiado en las diferentes épocas. La primera ropa íntima que se diseñó fue laborada con cuero, y poco a poco ha ido evolucionando, en mi ETAblog de hoy te cuento un poco de historia sobre estas indispensables prendas.

En tiempos de los egipcios ya se utilizaba un tipo de ropa interior, exclusivamente para los hombres, mientras que las mujeres no llevaban prendas interiores.

En el Imperio Romano se posicionó el uso de ropa interior por la higiene personal que ya tomó alta importancia. Las prendas entre hombres y mujeres eran diferentes, además también entre las clases sociales existía una diferencia pronunciada.

Las prendas femeninas empezaron a conocerse como especiales fetiches sexuales, aunque más tarde, en la Edad Media, dejaron de serlo por un buen tiempo, motivo por el cual la ropa interior se volvió mucho más pesada, larga y discreta, especialmente diseñada para cubrir el cuerpo hasta la llegada de la Revolución Francesa.

A partir de aquí la mujer se convierte en la mayor protagonista de ropa interior, y con su evolución se ha transformado en tipo de prendas sensuales, desde los corsés hasta los modelos más atrevidos de la actualidad. Sin duda, los ligueros y medias de nylon también juegan un papel importante en la sensualidad y atribuye un look atrevido junto a los principales materiales como la seda y los fabulosos encajes, los favoritos de muchas de nosotras.

Tiempo después se empiezan a diseñar sujetadores especialmente para potenciar los pechos y se introducen las tallas en todas las prendas íntimas. Durante la Segunda Guerra Mundial se empieza a utilizar materiales sintéticos y aparecen el Látex o la Lycra, entre otros. En los años cincuenta la industria del cine influenció a las prendas íntimas, volviéndolas cada vez más atractivas. El raso y las transparencias triunfan de la mano de actrices como Marilyn Monroe, uno de los símbolos sexuales más populares de la década.

En los años setenta con la llegada de la liberación femenina volvió el escote y se comenzaron a romper tabúes y desarrollar nuevos estilos de lencería. Aparecen los corpiños, los sujetadores de aro y un gran número de prendas diferentes que continúan evolucionando hasta convertirse en un básico en el armario de cualquier mujer.

La lencería actual busca la comodidad sin renunciar a su cualidad, a la feminidad, al atrevimiento y a la sofisticación. Realmente existen tantos estilos, no sólo como mujeres, sino como estados de ánimo, momentos de la vida, situaciones, o eventos de cada mujer, desde lo más informal, hasta lo formal, así que, en la actualidad simplemente basta con buscar el tipo de prenda íntima perfecta para la ocasión y momento de la vida.

En ETAFASHION queremos que te sientas cómoda y esta semana tenemos para ti el 3X2 en ropa interior y pijamas. Cuéntanos cuál es tu momento actual: ¿sexi, formal, atrevida?

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